¿Te gustaría tener un espacio donde puedas relajarte y disfrutar de los momentos simples? Entonces, ¡el estilo hygge es para vos!
El hygge (se pronuncia “ju-ga”) es una filosofía danesa que se basa en crear ambientes acogedores y confortables. Se trata de encontrar la felicidad en las pequeñas cosas de la vida, como disfrutar de una taza de té caliente en una manta suave o leer un libro a la luz de las velas.
En esta nota, te vamos a contar todo lo que necesitas saber sobre el estilo hygge. Los elementos básicos del estilo, cómo aplicarlo en tu hogar y dónde encontrar inspiración.
¿Qué es el hygge?
La palabra hygge no tiene una traducción exacta al español. Se puede traducir como “calidez”, “comodidad” o “bienestar”. El hygge más que una técnica de decoración, es un estilo de vida, y está centrado en crear ambientes que te permitan disfrutar cada momento de la vida.
El hygge se puede aplicar a cualquier espacio, desde tu casa hasta tu lugar de trabajo. Se trata de crear un ambiente cálido y acogedor donde te sientas cómodo y relajado.
Elementos básicos del hygge
Cada elemento que utilizamos colabora en la construcción del ambiente perfecto:
- Elegí materiales naturales: la madera, la piedra y el cuero son materiales naturales que aportan calidez y confort a los espacios. Podés usar estos materiales en el mobiliario, los suelos, las paredes o los techos.
- Dejá que entre la luz natural: la luz natural es fundamental para crear espacios acogedores y luminosos. Si tu casa tiene pocas ventanas, podés usar cortinas o persianas de colores claros para dejar entrar más luz.
- Agregá plantas: las plantas aportan vida y frescura a los espacios. Te proponemos que incluyas plantas en el interior o en el exterior de tu hogar.
- Usá colores neutros: los colores neutros, como el blanco, el beige y el gris, crean un ambiente relajado y tranquilo. Usar estos colores en las paredes, el mobiliario o los textiles.
- Agregá textiles suaves: los textiles suaves, como las mantas, los cojines y las alfombras, añaden calidez y comodidad a los espacios. Probá colocando textiles suaves en el sofá, las sillas, la cama o incluso el suelo.
Inspiración hygge
A continuación te ofrecemos algunas ideas que te van a inspirar para crear un ambiente hygge.
Living
El living es el lugar perfecto para relajarse y disfrutar de la compañía de tus seres queridos. Para crear un ambiente hygge en el living, puedes colocar un sofá cómodo, una alfombra suave, mantas y cojines. También puedes agregar velas, plantas y objetos personales que te hagan sentir bien.
Cocina
La cocina es un espacio donde pasamos mucho tiempo, por eso es importante que sea un lugar acogedor. Para crear un ambiente hygge en la cocina, puedes colocar una mesa con sillas cómodas, una vajilla bonita y plantas. También puedes agregar velas o música para crear un ambiente más relajado.
Dormitorio
El dormitorio es el lugar donde descansamos, por eso es importante que sea un lugar tranquilo y acogedor. Para crear un ambiente hygge en el dormitorio, puedes colocar una cama cómoda, una alfombra suave, mantas y almohadas. También puedes agregar velas, plantas o música para crear un ambiente más relajante.
Baño
El baño es un espacio donde nos relajamos y nos mimamos, por eso es importante que sea un lugar acogedor. Para crear un ambiente hygge en el baño, puedes colocar una bañera o ducha cómoda, toallas suaves, velas y plantas. También puedes agregar música o aceites esenciales para crear un ambiente más relajante.
Otros ambientes
Por su puesto que el hygge se puede aplicar a cualquier ambiente de tu casa.
En el exterior, puedes colocar una hamaca, una silla colgante o una manta para relajarte al aire libre.
En el pasillo, puedes colocar una lámpara de pie con una pantalla de tela para crear un ambiente más acogedor.
En el estudio, puedes colocar una mesa de trabajo cómoda, una silla ergonómica y plantas para crear un espacio tranquilo y productivo.
Con pequeños detalles, puedes crear espacios acogedores donde te sientas bien como nunca antes.
El hygge es un estilo de vida que se centra en la creación de momentos de bienestar y felicidad. No es necesario gastar mucho dinero o hacer grandes cambios para aplicarlo en tu casa. Con pequeños detalles, podés crear espacios acogedores donde te sientas bien como nunca antes.
Sé creativo y experimentá
No hay reglas estrictas para aplicar el hygge. Lo importante es crear espacios que te hagan sentir bien y sobre todo puedas compartirlo y disfrutarlo con tus seres queridos.